jueves, 10 de enero de 2013

Capítulo 3: Juegos de mesa


Entramos en la sala, y como era de esperar, estaba llena de jóvenes. Justo cuando estábamos subiendo las escaleras, apagaron las luces, y al no ver nada me caí, pero por suerte Harry me cogió del brazo y me llevó al asiento de mi mano. Cuando le vi la cara se estaba riendo. Se estaba riendo de MÍ.
-A mí no me hizo gracia. -le dije molesta. Harry inmediatamente cambió su gesto por uno serio.
-Lo siento, yo no sab…
-¡Era broma! En el fondo hace gracia. -Harry se rió. -Dije en el fondo. Muy en el fondo, ¿vale?
Los dos nos reímos y empezó la película. Al principio no me gustaba, pero luego empezó la parte de los sustos, y ahí fue cuando cada vez que aparecía esa niña de la película, soltaba un pequeño chillido. Harry se estuvo aguantando la risa toda la película.
-Ven aquí… -dijo Harry pasando su brazo por mi hombro y acercándose más a mí. -¿Te está gustando? -dijo divertido.
-Para nada… -dije yo conteniendo la risa.
-Jajaja lo siento, la próxima vez elegirás tú.
-Contigo vería cualquier cosa…
Espera…. ¿había dicho eso?  “Espero que no se haya dado cuenta. Y si se ha dado cuenta, rezaré para que lo pase por alto” pensé.
-¿Y eso por qué? -me preguntó curioso.
-No sé… -bajé la cabeza porque estaba más roja que nunca, pero en ese mismo momento, una escena iluminó toda la sala de blanco, y se me podía ver perfectamente.
-¿Te pasa algo? -dijo Harry fingiendo preocupación.
“¡Já! Como si no lo supieras…” -pensé.
-No, solo que… tengo que ir al baño. -fue esa la primera escusa que se me ocurrió, así que salí.
Pocos minutos después, la gente ya había salido de la sala, y me encontré con Harry afuera.
-¡Hola! Otra vez.. -le sonreí.
-¡Hombre! Pensaba que no volvías. -dijo sorprendido de verme sonreír.
-Ya, bueno… ¿te ha gustado?
-Sí, pero si no te hubieras ido, estaría mejor…-dijo con cara de pena.
-Lo siento, no las soporto.-Él me sonrió y me llevo a casa de la mano. Al llegar, había una nota en la puerta, ponía:
Eh, Harry!  Te vi en el cine con ____, Solo quería recordarte que usases protección esta noche. No queremos que nuestro Harry tenga hijos jijiji.
Atte. Zayn Malik,
-No sé de qué habla, dejémoslo. -Harry parecía nervioso. Como era temprano, jugamos a un juego de mesa, donde había que hacer lo que ponía en las cartas.
-¡Te toca! -dijo Harry alegremente. -Tienes que…-cogió una carta y sonrió. -Besar al chico que tienes delante.
¿Besar al chico que tenía delante? Por mí, ningún inconveniente.
-¡No pone eso! -protesté, aunque en el fondo mataría por un beso suyo.
-Sí, mira. -me enseñó la carta.
-¡Es tu letra! -me reí.
-¿Y qué? Pero lo pone. Bésame. -se acercó más a mí.
Sonreí y nos fuimos acercando poco a poco, hasta que nuestros labios rozaron un poco; y más tarde se juntaron hasta dejarse sin aliento el uno con el otro. Nos separamos después de un buen rato.
Harry empezó a buscar algo, un bolígrafo. Empezó a escribir en una carta sonriendo. Y me la enseñó.
Si hay una chica enfrente tuya,  debes quitarle la camiseta.
Me empecé a reír, pero viendo su cara me enteré de que lo decía en serio. Me acerqué a él y los dos nos levantamos. Él inseguro me cogió de la cintura, agarrando la camiseta.
-¿Seguro que quieres jugar? -dijo Harry en tono pervertido. -Si quieres, pongo el aire acondicionado, si tienes calor, claro.
-¡Eres un pervertido! -me reí. Harry solo levantó los hombros y empezó a subirme la camiseta, lentamente; muy lentamente.
-¿Puedes ir más rápido? -pedí. Harry se limitó a reír y a ir más lento todavía. Subí los brazos para deshacerme de la camiseta y Harry se llevó una gran decepción: debajo de la camiseta llevaba otra de tirantes.
-Me toca -dije satisfecha. Cogí boli y papel y escribí.
Quítate la camiseta lo más rápido posible.
Harry se rió y obedeció.  Esta vez lo hizo rápido. Cuando terminó se acercó otra vez y me volvió a besar.
-¡Wow! Pena que no lo haya grabado. -Harry y yo nos separamos del susto. Ninguno de los dos había hablado. ¿Quién lo ha había hecho?
-¡¿Zayn?! -gritó Harry. -¿Qué haces en bóxers?
-Lo he pasado bien con Ari -se rió.
Miré a Harry perpleja. ¿Qué clase de amigos tenía este?
-¿Cómo entraste? -preguntó enfadado.
-Te dejaste la puerta abierta.
-¿Y la nota?
-Eso fue idea de Ari. -dijo Zayn nervioso.
Siguieron discutiendo cuando entré al cuarto de Harry y vi a Ari peinándose. Ella estaba vestida, a diferencia de Zayn.
-¡Hola! - intenté sonreír. No sabía qué iba a ocurrir conmigo y con Harry, pero quería terminar lo que habíamos empezado.
-¡___! ¿Qué haces aquí? ¿Vives con Harry? -preguntó ella.
-Sí, vivo con él, más o menos. Vine ayer.
-¡¿Ayer?! ¿Y os ibais a acostar? Solo os conocéis de un día, _____
-¿Qué? ¡No! No íbamos a hacerlo. Además, yo soy… -dije avergonzada.
-Tranquila, todos y todas los somos. Yo lo fui ayer. Es más, lo fui hace dos horas. -sonrió avergonzada. -Lo siento, Zayn es muy sexy y pervertido, y no me pude contener…
-Jajajaj, no pasa nada. -respondí.
-Nena, nos vamos. -entró Zayn alegre y mirando a Ari. Zayn se empezó a vestir y yo fui a la cocina. Allí estaba Harry poniéndose la camiseta.
-Lo han hecho en tu cuarto. -dije riéndome. Me miró sonriendo.
-Conociendo a Zayn, es lo más normal del mundo -Zayn y Ari se fueron.
Harry  y yo fuimos a la cama. Y otra vez volvió a dormir en bóxers.
-¿Duermes con pijama? -me preguntó extrañado.
-Lo dices como si dormir desnudo fuera lo más normal. -Harry sonrió.
-Para mí lo es. Buenas noches. Me dio un beso corto en los labios y agarré su brazo para dormirme. Tengo la costumbre de dormir con algo abrazado. Así que tuve dos opciones: dormir abrazada a Harry o dormir abrazada a un peluche, pero en este caso tendría que pasar la noche soportando  sus bromas. Obviamente, elegí la primera opción.

No hay comentarios:

Publicar un comentario