Capítulo 12: -Me ha encantado.

Cuando llegamos a casa, estaba Niall asomado a la puerta, haciéndonos señas de que pasáramos. Bajé del coche y esperé a Harry, cuando se bajó le di la mano y entramos a casa.

-¡________! ¡HARRY! ¿SABÉIS QUÉ? ¿EH? ¿LO SABÉIS? ¿NO LO SABÉIS? ¡SENTAOS! ¡OS LO DIGO!

Nada más entrar Zayn empezó a gritar y Ari a reírse.

-No, Zayn, cariño, no lo sabemos. Cuéntanoslo. -dije en voz dulce.

-¿CARIÑO? ¡ESE SOY YO! -gritó Harry poniendo cara de cachorrito y cruzándose de brazos.

-Tú eres más que eso. -él me miró, me sonrió y dio unos golpecitos en su mejilla para que le dara un beso. Me reí y me puse de puntillas para besarle la mejilla, pero cuando estuve a pocos milímetros de él, giró rápidamente la cabeza y me dio un beso en los labios.Así

-¡¡CHICOS!! -gritó Louis. -¡ZAYN TIENE UNA NOTICIA!

-¡¡¡VOY A SER PADRE!!! -gritó Zayn abrazando a Ari, quien se tapó los oídos.

-¡No me grites, Zayn, por Dios! -dijo Ari.

-Lo siento, amor. -dijo Zayn dándola un beso.

-¡Felicidades! -dijo Harry dándole una palmada a Zayn.

-¿Te acuerdas cuando te hicimos una broma sobre la mujer que…

-Sí, Louis, me acuerdo, no fue gracioso. -dijo Harry molesto.

Estuvimos un rato hablando hasta que nos fuimos Harry y yo a casa a comer.

Hicimos entre los dos macarrones, y nos sentamos a comer.

-Ven aquí, amor. -dijo Harry cogiéndome y sentándose en la silla, y yo encima de él. Comimos así, y cuando terminamos vimos Titanic.

-Es mi película favorita. -dijo.

-Yo nunca la vi entera, siempre me quedaba dormida. -dije riéndome.

Mientras veíamos la película, Harry me abrazada y cuando los protagonistas se miraban o se besaban, él me besaba a mí.

Cuando terminó la película, seguimos abrazados un rato hasta que Liam mandó un mensaje a Harry.

“Hazza, vamos a hacer una fiesta esta noche, los chicos iremos a una discoteca y las chicas harán una fiesta de pijamas.”

Como estaba abrazada a él, pude leer lo que contestó.

“Mejor mañana, hoy no tengo ganas de ir a ningún sitio.”

-Te prometí ir al parque de atracciones. ¿Vamos ahora?

-Vale. -le di un beso corto en los labios y me levanté.

-Pero con una condición.

-¿Cuál?

-Bésame.

Le sonreí y me volví a tumbar encima suya. Nos besamos durante mucho tiempo, y al final, nos vestimos y salimos.

*EN EL COCHE*

-¿Cuál fue tu primera impresión de mí cuando me viste en el aeropuerto? -le pregunté.

-Pensé: “¿en serio me voy a quedar un mes con esa belleza”? -me reí. -¿Y la tuya?

-Pensé que era una pena que fueses mi primo. Como te vi con mi tía, creí que éramos primos. -nos reímos y llegamos.

-¿En serio nos vamos a montar a eso? -preguntó Harry mirando una montaña rusa muy alta.

Nos lo pasamos muy bien esa tarde, nos montamos en casi todo, y me compró un peluche. Cada poco tiempo me daba besos en la boca o en la mejilla.

-Estoy agotado. -dijo tumbándose en el sofá nada más llegar a casa.

-Es tarde, haré la cena. -dije dándole un beso.

Hice una cena rápida de preparar y cuando terminé, apareció Harry y cenamos juntos hablando de qué tal ha ido el día.

Cuando terminamos, él fue a la cama y yo fregué todo, lo sequé y lo guardé. Cuando llegué al dormitorio, estaba Harry dormido.

“¡Vaya! Pensé que hoy íbamos a hacerlo por primera vez. Tantos nervios para nada. En fin…” pensé.

Me puse un pijama muy corto y me tumbé a su lado. Empecé a recordar el primer día que lo vi, el primer día que fui con él a la panadería y el día en que me quedé dormida. También recordé mi discusión con mi mejor amiga y la fiesta con Tom. Sin duda, desde que bajé del avión han sido unos días impresionantes. Conozco a Harry desde hace poco, pero estoy completamente enamorada de él, no sé qué haría sin él.

Desperté de esos pensamientos cuando noté que Harry empezaba a besarme el cuello. Cuando se dio cuenta de que había abierto los ojos, me empezó a besar, todavía mejor que los otros días. Podía oler su perfume. Se tumbó encima de mí, pero apoyó sus brazos en el colchón para no aplastarme. Volvió a bajar a mi cuello y empezó a dejar besos por toda la zona. No pude evitar gemir, y Harry sonrió al oírme. Me miró y me empezó a quitar el pijama. Él, como todas las noches, solo tenía los bóxers puestos. me acarició los senos por encima de la ropa interior, y volví a soltar un gemido, un poco más alto que el anterior. Me quitó el sujetador y bajó la cabeza para besarme los senos lentamente, empecé a gemir más fuerte y al rato volvió a besar mis labios, notando un bulto en mi pierna. Poco a poco me fue dando caricias por todo el cuerpo, estaba nerviosa, pero no quería dejarlo. Me bajó la ropa interior y comenzó a besar mi vagina, yo gemía como loca del placer, no quería que se acabase.

Subió y me empezó a besar. Me puse encima de él y le quité los bóxers.

“Es enorme” fue lo único que podía pensar.

No sabía cómo hacerlo, pero antes de venir aquí, unas amigas de Los Ángeles, hablaban sobre su primera vez. A partir de eso, empecé a besar y a chupar su miembro lo mejor que pude, estuve un rato así cuando Harry me volvió a dar la vuelta, quedando debajo de él, y me empezó a besar otra vez.

Oímos en timbre, y Harry bufó. Me volvió a acariciar lentamente todo el cuerpo.

-¿No vas a ver quién es? -dije con la respiración entrecortada de la excitación.

-No importa quién sea. -dicho esto metió un dedo dentro de mí, y me retorcí de la excitación, después de un rato, metió otro, metiéndolo y sacándolo rápido hasta que estuve bastante lubricada. Luego rozó su miembro en mí, pero sin llegar a penetrarlo.

-Hazlo ya… -dije en un suspiro.

Harry me hizo caso. Empezó a penetrarme lentamente, cada vez más rápido. Gemía de placer y de dolor, más placer que de dolor, y a Harry eso le excitaba más. Estaba segura de que nunca me iba a arrepentir de este día. Abrí más las piernas y Harry me agarró fuerte de la cintura para sentir más su miembro. Empecé a gemir cada vez más fuerte hasta que llegué al orgasmo. Harry empezó a dar embestidas cada vez más rápidas, hasta que sentí algo llenarse en mí. Harry sacó su miembro y me besó otra vez apasionadamente. Me abrazó por detrás y me susurró:

-Me ha encantado.

-Y a mí. -respondí con la respiración agitada todavía. Me agarró más fuerte y nos quedamos dormidos.