Elegimos una película y
fuimos a mi habitación para verla en el ordenador.
-Entonces, ¿yo me voy a
Inglaterra o tú te quedas a vivir aquí? –pregunté.
-Te vienes conmigo. –me
dio un beso en los labios y se sentó a mi lado, abrazándome.
Empezó la película y yo
lo único que hacía era mirar a Harry. Observaba cada fracción de su cara, dando
gracias por haber vuelto. Sus labios eran perfectos. Sonreí al saber que eran
míos, y sus ojos… No tengo nada que decir. Perfecto se le queda poco. Su pelo,
su perfume, su cuerpo, su todo. Me enamoraba cada vez más. Harry sonrió y me di
cuenta de que me miraba de reojo. Me reí.
-¿Te gusta la película?
–dijo irónico.
-Me encanta. –dije
apoyando mi cara en su hombro. –Pensé que nunca más íbamos a estar así. –sonreí
y él se rió.
-¿Acaso pensabas que te
iba a dejar ir así como así?
-Por un momento lo dudé…
Después vino un silencio
incómodo, donde ninguno de los dos sabía que decir.
-Ahora sabes que nunca
te dejaré ir. –dijo Harry acariciándome el pelo.
-¿Nunca? –me incorporé
para mirarle
-Nunca. –me besó y se
oyó la puerta abrirse. Del susto, di un saltito y Harry se rió.
-Nos vamos. Estaremos
toda la tarde fuera, y llegaremos tarde; así que haced vosotros la cena. –dijo
la madre de Harry. -¡Ah! Y no vayas a ningún sitio. –terminó mirando a Harry.
Nos
quedamos mirándonos por un rato hasta que se oyó la puerta cerrarse y Harry me
cogió la cara y me empezó a besar apasionadamente. Me tumbó en la cama y él
encima mía con sus brazos apoyados para no dejar todo el peso sobre mí,
mientras seguía besándome. Me levanté como pude y apagué el ordenador. Al darme
la vuelta, Harry ya estaba sin camiseta. Sonreí y él me cogió y me volvió a
tumbar en la cama. Con una mano tiró todos los peluches que tenía al suelo, lo
que hizo que me riera mientras Harry aprovechaba para quitarme la camiseta.
Poco después estábamos ya desnudos.
Me tumbé a su lado con
la cabeza apoyada en el torso desnudo de Harry, oyendo su respiración y notando
su corazón latir rápido. Colocó el brazo alrededor de mí y estuvimos un tiempo
tumbados hasta que sonó mi teléfono.
-¿Sí?
-¡Hola, cariño! ¿Qué tal?
¿Qué hacéis? –dijo mi madre.
-Viendo la película.
-¿Tanto dura? Han pasado
dos horas desde que nos fuimos. –dijo extrañada.
“¿Dos horas? ¿Tanto
tiempo hemos…?”
-Hola, ¿hay alguien ahí?
–preguntó mi madre.
-¡Sí! Es que hemos visto
otra.
-Ya, seguro… -dijo poco
convincente. -¿No habréis…?
-Vale, chao, mamá, yo
también te quiero. –dije interrumpiéndola y colgando el teléfono. Harry soltó
una carcajada.
-Nos han pillado. –dijo entre
risas.
-Ja, ja, qué gracioso. –dije-
Que vergüenza, por Dios… Voy a ducharme.
-Y yo. –se levantó y me
cogió de la cintura para ir al baño.
Cuando entramos, abrí el
grifo y Harry me cogió y me metió en la bañera. Mientras caía el agua, Harry me
abrazaba y me besaba el cuello. Yo solo cerraba los ojos. Me enjaboné el pelo y
él el suyo, y luego él pasó sus manos llenas de espuma por todo mi cuerpo, y yo
hice lo mismo con él. Cuando terminamos, me besó y salimos a secarnos. Me sequé
un poco el pelo y me lo peiné, para luego vestirme y salir a dar una vuelta.
Fuimos a un restaurante
cerca y vimos a Niall sentado en una mesa con los brazos rodeando a una chica
de más o menos su edad, rubia y con los ojos azules, preciosa. Tenía una
sonrisa bonita y no hay que decir mucho de sus ojos, salvo que son perfectos.
-Espera… ¿Ese no es
Niall? –preguntó Harry.
-¿No estaba saliendo con
Clara? –dije perpleja.
no vuelvas a tardar tanto en subir otro capiitulo casii me muero *---* geniales los dos ^^
ResponderEliminarjjeje lo siiento, ahora subo otro ^^
EliminarEl siguiente pero YA! no se que hare cuando se acabe la temporada
ResponderEliminarAhora voy ! Quedan unos pocos capítulos. Cuando acabe, subiré capítulos de mi otra novela con Niall y luego ya seguiré con la segunda temporada :3
Eliminar