Intenté controlar mis lágrimas para que no saliesen, pero verle
ahí me impedía.
Harry estaba de rodillas en el salón con un anillo en la mano y
una rosa en la otra. Me miraba nervioso y le temblaban las manos.
-_____. Te amo. Lo sabes. Sabes que te quiero muchísimo. Te repito
una y otra vez que no quiero perderte. Nunca. Te he prometido muchas veces que
estaría contigo hasta que nos muramos. Yo lo voy a hacer, ahora te estoy
pidiendo que lo hagas tú. -empezó Harry con voz temblorosa.
Mis lágrimas saltaron,y mis piernas seguían temblando como locas.
-____, ¿quieres…? -tragó saliva y respiró. -¿Quieres casarte
conmigo?
Me quedé paralizada. Quería decirle algo, besarle, abrazarle,
prometerle estar con él para siempre, quería tenerle a mis brazos, dejarle que
me pusiera el anillo, quería casarme con él.
Pero la sorpresa me podía. Mi cuerpo estaba totalmente paralizado.
-Por favor, responde. -dijo Harry con un hilo de voz. Levantó la
cabeza y me miró.
Como pude, asentí con la cabeza. Harry, ante mi movimiento, se
levantó depacio y se acercó aguantando las lágrimas. Me cogió de la cintura
para abrazarme pero le sujeté del cuello y le besé. Él me siguió el beso
mientras me abrazaba muy fuerte. Me separé por falta de aire, quedando a pocos
centímentros de su cara. Cerré los ojos para soltar las lágrimas que me
molestaban.
Acarició mi mejilla limpiándome las lágrimas y me dio las gracias
susurrando. Cogió mi mano, juntando nuestras frentes y me puso el anillo. Me
dio un beso en la punta de la nariz.
-Por eso te fuiste.. -dije.
-Ahora te das cuenta. -se rió. -Eres lo más tonto que hay.
-Lo sé. -dije y me reí.
-Vamos. -me dio la mano y me llevó a la cocina.
Nada más entrar, vimos a Niall intentando esconderse.
-¿Hola? -dije riéndome.
-¡NIALL! -se quejaron todos.
-Og, Niall, mira que eres… Iba a ser una sorpresa pero no, tenía
que salir Niall a coger una croqueta, ¿eh? -regañó Zayn.
-¡Dejarle! Solo tenía hambre.. -le defendió Clara.
-No pasa nada. -dijo Harry riéndose.
Todos salieron de su “escondite” y nos felicitaron. Sacaron las
bandejas de comida y empezamos a comer. Eran las dos, estábamos todos muertos
de hambre.
-¿Por eso vinisteis? -pregunté.
-Sí. -respondió Zayn. -Hazza me dijo que planeara algo porque te
quería pedir matrimonio y decidí reunir a todos. Luego se puso tan nervioso que
se le olvidó el anillo en la habitación. -se rió Zayn.
-Sí. -respondió Harry avergonzado.
-No pasa nada, amor. -dije y pasó su brazo alrededor de mi cuello
para besarme.